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Nea Kameni es una pequeña isla volcánica situada en el centro de la caldera de Santorini, famosa por sus impresionantes paisajes volcánicos y sus aguas termales. Visitar Nea Kameni es una experiencia única que te permite explorar el corazón volcánico de Santorini y disfrutar de vistas espectaculares del entorno
Nea Kameni se formó a través de sucesivas erupciones volcánicas a lo largo de los siglos, siendo la más reciente en 1950. La isla es parte del complejo volcánico de Santorini, uno de los más activos en el Mar Egeo. El terreno de Nea Kameni está compuesto principalmente de rocas volcánicas negras y grises, creando un paisaje lunar único.
En la cima, el cráter principal ofrece vistas espectaculares del interior del volcán y de la caldera circundante. Aquí, se pueden ver las fumarolas, que son aberturas en la superficie del suelo por donde emanan gases volcánicos. Este es un excelente lugar para aprender sobre los procesos volcánicos y la historia de las erupciones que han formado la isla. Guías turísticos a menudo están disponibles para proporcionar explicaciones detalladas y responder preguntas sobre la geología y la historia volcánica de Santorini. Cráter del volcán
Traje de baño: Usá uno viejo que no te duela manchar, el azufre puede dejar marcas permanentes.
Temperatura: Entrá al agua lentamente para que tu cuerpo se adapte y evites un shock térmico.
Beneficios: Las aguas alivian problemas de piel, pero consultá al médico si tenés condiciones especiales.
Acceso: Solo se llega en barco y hay que nadar un pequeño tramo. ¡Cuidado con el fondo rocoso!
Color del agua: Puede ser verde o naranja por los minerales. No es contaminación, es parte del encanto.
Tiempo recomendado: No más de 30 minutos para evitar deshidratación o reacciones.
Cuidado del entorno: Evitá el uso de cremas o repelentes antes de nadar. Es un ecosistema frágil.
Qué llevar: Toalla, ropa de cambio y agua dulce para enjuagarte tras el baño termal.
Nea Kameni es una isla volcánica deshabitada en el centro de la caldera de Santorini y no cuenta con transporte público regular como ferris que conecten directamente desde la isla principal de Santorini. Las opciones para llegar a Nea Kameni generalmente implican algún tipo de transporte privado o excursión organizada
Para visitar Nea Kameni, es necesario tomar un barco desde el puerto de Fira, Athinios o Ammoudi. Numerosas empresas turísticas ofrecen excursiones en barco que incluyen visitas a Nea Kameni y a otras islas cercanas como Palea Kameni y Thirasia. Los recorridos suelen durar entre dos y seis horas, y muchos incluyen paradas para nadar en las aguas termales. Volcán de Santorini
Una de las excursiones más destacadas es el crucero por las islas volcánicas, que incluye una visita a las aguas termales de Palea Kameni. Este recorrido te lleva a través de la impresionante caldera de Santorini, donde podrás nadar en las cálidas aguas ricas en minerales, conocidas por sus propiedades terapéuticas. El crucero también ofrece vistas espectaculares de las formaciones volcánicas y la posibilidad de aprender sobre la geología única de la región. Estas excursiones suelen incluir: Caminata hasta el crater del volcan y nadar en las aguas termales de palea Kameni. Hot Springs Pelea Kameni
Caminar sobre un volcán activo no es algo que se haga todos los días.
La excursión a Nea Kameni, en el corazón de la caldera de Santorini, es una experiencia única. Desde el momento en que el barco parte hacia esta isla volcánica, sabes que estás a punto de vivir algo fuera de lo común. El paisaje es árido, potente, casi lunar… y a cada paso, el calor bajo tus pies te recuerda que el volcán sigue vivo. La subida es sencilla pero impactante, con vistas impresionantes a los acantilados blancos de Santorini.
Si buscas algo más que playas y postales, este es tu plan.
Nea Kameni es una isla volcánica en el centro de la caldera de Santorini. Es famosa porque puedes caminar sobre un volcán activo y ver cráteres, fumarolas y paisajes únicos.
Solo en barco, desde el puerto antiguo de Fira o desde Athinios. La travesía dura unos 20-30 minutos y suele formar parte de una excursión guiada.
No se puede ir por libre. Solo se accede mediante excursiones organizadas con guía, ya que es una isla protegida sin servicios.
Paseo en barco, guía turístico, caminata al cráter y, en muchos casos, una parada para nadar en las aguas termales de Palea Kameni. Algunas incluyen comida o atardecer.
Excursiones básicas desde 25 €. Las más completas pueden costar entre 50 y 70 €. La entrada a la isla cuesta 5 € extra, pagaderos allí.
La subida no es difícil, pero el terreno es irregular. Es recomendable estar en buena forma y llevar calzado adecuado.
Ropa cómoda, calzado cerrado, protección solar y agua. Si vas a nadar en las termales, lleva bañador y toalla.
Sí, muchas excursiones incluyen una parada en Palea Kameni para nadar en sus aguas sulfurosas. Eso sí, manchan el bañador.
Sí. Está monitoreado por expertos y las rutas son seguras si sigues las indicaciones. No hay actividad peligrosa registrada.
La caminata dura entre 1 y 1,5 horas. Se hace con guía y hay tiempo para explorar y tomar fotos.
No. No hay baños, sombra ni tiendas. Debes llevar lo que necesites: agua, snacks y protección solar.
Puede serlo si están acostumbrados a caminar. No hay peligro, pero sí exige algo de esfuerzo físico y cuidado.
Nea Kameni es el volcán activo y se visita caminando. Palea Kameni es más antigua y es donde están las aguas termales para nadar.
Normalmente se visitan también Palea Kameni y Thirassia. Algunas excursiones terminan con vistas al atardecer desde el mar.
Al mediodía hay más luz para fotos. Al atardecer la experiencia es más mágica y romántica. Depende de lo que busques.
Hay muchas formas de experimentar Santorini: desde perderse en las calles blancas de Oia, hasta ver atardeceres que parecen pinturas. Pero una de las más distintas —y menos glamurosas, al menos a primera vista— es subir a un volcán activo en medio del mar, bajo el sol del Egeo. Eso es Nea Kameni.
Yo hice la excursión sin muchas expectativas. Me tentaba más la experiencia de navegar en barco que la caminata en sí. Pero fue una de esas sorpresas que te dejan pensando.
El viaje comienza desde el viejo puerto de Fira, en un barco tradicional. Ya desde ahí el paisaje cambia. Dejás atrás las casas colgadas en los acantilados para avanzar hacia un islote negro y árido que parece de otro planeta.
Cuando llegás a Nea Kameni, te encontrás con un paisaje crudo, lleno de piedras volcánicas, senderos polvorientos y un calor seco que se mete en la piel. No hay sombra. No hay vegetación. Solo tierra, roca, y un silencio imponente. Y sin embargo, ahí estás, caminando sobre un volcán que sigue “vivo”, cuyas fumarolas aún sueltan calor y olor a azufre como un recordatorio de que la tierra está en constante movimiento.
El camino hacia la cima no es difícil, pero sí requiere algo de esfuerzo. Hace calor, el suelo es irregular y se levanta polvo con cada paso. Pero a cada metro que subís, las vistas se vuelven más increíbles: ves toda la caldera, los pueblos blancos recortados sobre el acantilado, el mar azul oscuro… y te sentís pequeño, pero profundamente vivo.
Recuerdo detenerme en un punto alto, justo donde salía vapor del suelo. Puse la mano sobre la roca y sentí el calor. Y pensé: «Estoy tocando el corazón de la isla». Porque eso es Nea Kameni: el centro geológico de todo lo que Santorini es hoy.
Sí, si sabés lo que vas a buscar. No esperes una excursión “bonita” al estilo postal de Instagram. Nea Kameni es áspera, salvaje, casi silenciosa. Pero ahí está su valor. Porque te conecta con el origen volcánico de Santorini, con la fuerza que la formó, con su historia de destrucción y renacimiento.
Además, muchas excursiones combinan la caminata con un baño en las aguas termales cercanas (en Palea Kameni), lo que suma una experiencia más sensorial y relajante al día.
Llevá zapatillas cómodas, gorra, protector solar y mucha agua. El sol pega fuerte y no hay sombra en todo el recorrido.
No vayas con prisa: caminá despacio, respirá el aire denso y observá el paisaje. Es parte de lo que hace que valga la pena.
Si podés, elegí una excursión que salga temprano o cerca del atardecer, cuando el calor es más soportable y la luz lo transforma todo.
¿Merece la pena una excursión a Nea Kameni en Santorini? Según mi experiencia, sí. Porque no es solo una caminata. Es una forma distinta de entender la isla. De pararte sobre su origen. De sentir la fuerza de la tierra bajo tus pies. Y porque, a veces, los lugares más inhóspitos son los que más te enseñan.
No es la postal más linda, pero sí una de las más auténticas. Y eso, en un lugar tan fotografiado como Santorini, es un regalo inesperado.